Cuenta atrás para que los hogares puedan ‘vender’ su electricidad para bajar el recibo de luz

El Gobierno se da dos meses para tener listo ya el sistema de compensación de los excedentes de electricidad que los autoconsumidores volcarán a la red.

La verdadera revolución del autoconsumo está a la vuelta de la esquina. Los hogares y las pequeñas empresas que han dado el paso de producir su propia energía podrán rebajar la factura gracias a volcar a la red la electricidad que no consuman desde principios de 2020. Las estimaciones del Gobierno es que en enero y febrero todo esté listo para que los pequeños clientes empiecen a vender su electricidad y que se les compense por ello.

El secretario de Estado de Energía, José Domínguez, ha desvelado que “en un par de meses” estará en marcha el mecanismo de compensación de excedentes que permitirá a los autoconsumidores ahorrar en su factura eléctrica. Lo ha hecho durante su intervención en el Congreso Nacional de Energías Renovables, organizado por la patronal Appa, ante un auditorio deseoso de que le confirmaran el impulso al autoconsumo.

Una medida que se realizará con condiciones. Sólo es aplicable a los usuarios que tengan instalaciones de menos de 100 kilovatios de potencia y siempre que la energía sea de origen renovable (para autoconsumo lo normal es que utilicen placas fotovoltaicas).

Además, los autoconsumidores que se acojan a este tipo de compensación (facturación neta) no podrán hacer negocio y obtener una remuneración monetaria por la producción, sino sólo descuentos en la factura.  Los hogares y las empresas adscritas a este sistema verán rebajado su recibo hasta un máximo del 100% del componente de energía de su factura, que viene a ser un 35% del importe final.

En caso de que vertieran más electricidad de la que realmente consuman, no recibirían una compensación mayor a ese descuento y en ningún caso la contraprestación sería dineraria. Además, la compensación sólo afecta al componente de energía de la factura, y los peajes y cargos que se pagan como parte del recibo y los impuestos incluidos (en conjunto, aproximadamente un 65% del pago total) se seguirán abonando íntegramente.

Las comercializadoras de las cinco grandes eléctricas -Endesa, Iberdrola, Naturgy, EDP y ahora también Repsol- que ofrecen la tarifa regulada de la electricidad, el denominado Precio Voluntario del Pequeño Consumidor (PVPC), están obligadas a ofrecer  estas condiciones a sus clientes y llevar el descuento hasta el 100% de la electricidad consumida. Los hogares con tarifa regulada y que sean autoconsumidores podrán ver rebajada en su factura toda la electricidad que aporten.

En cambio, las comercializadoras del mercado liberalizado –unos dos centenares- podrán pactar libremente con sus clientes las condiciones con que se desarrolla esta compensación. Las eléctricas, por ejemplo, podrán imponer a sus usuarios descuentos en la factura inferiores al 100% de la electricidad aportada previsto con carácter general y no tienen obligación de cumplir los requisitos máximos.

Los autoconsumidores que se acojan a esta modalidad simplificada no podrán obtener ingresos monetarios por verter electricidad a la red, sólo descuentos en el recibo. Los usuarios que sí que pretendan tener ingresos más allá de los descuentos en la factura, deberán constituirse jurídicamente como productor de energía, realizando los trámites y las declaraciones fiscales que exige la ley.

Fuente: El Independiente